L. Carlos Sánchez
Cine suceso es una rolita bien prendida. Tiene cadencia que incita nostalgia. El sonido de un piano qué ufa gallo. Dan ganas de bailar, recordando esa tarde de abril bajo la luz cenital…
Bien rifado el Miguel Inzunza con su nuevo disquito: Al alcance de los peces. El ritmo y la metáfora, la imagen que describe y nos hace mirar. Como si estuviéramos allí.
De eso está hecha la poesía, de la evocación y del deseo también de salirle a bailar. Miguel nos incita, con su voz límpida, con los versos escritos quizá a conciencia, definitivamente desde el impulso. Porque sin abalanzarse desde el interior la poética estaría nulificada.
Por eso es que digo que está de aquellas, el disquito new, las rolas que ya rolan. Al alcance de los peces, al alcance de nosotros. Porque Inzunza vendrá el diecisiete de mayo, al lugar que es referencia, donde ocurre la trova, donde el canto es constante: Está Cabral. El restaurarte de Allende y Velasco, justo detrás de los palacios, el municipal y el del estado.
Un puño de canciones, la elocuencia en cada una de éstas, los versos que dicen la pasión, la nostalgia, el deseo.
Macizo suena la guitarra en Llano, esa rolita que acusa la mar devorando lo que se ama, como a esos barcos a la distancia. También parte de este nuevo disco. El repertorio que estaremos escuchando de noche, en el concierto del Cabral.
Getsemaní Inzunza, el carnalito, de Miguel y mío, me roló unos párrafos que describen la oferta del trovador:
“Miguel Inzunza regresa a Hermosillo para presentar Al alcance de los peces, nueva producción discográfica en que ha vertido las canciones más honestas de una reciente cosecha.
“Luego de una extensa gira con de más de doscientos conciertos en México y el extranjero, el cantautor mexicano y de firme trayectoria ofrece una fusión de diversos géneros vertidos en canción, con una sensibilidad fresca y vanguardista que va de lo más intenso a lo más intimista”.
Y mientras este océano de canciones desde las olas generosas que canta Miguel, yo me dispongo a esperar. Obviamente con la nómina de rolas, de fondo, de este disquito magistral que es Al alcance de los peces.
Y sentir las notas mientas llega el concierto en vivo, insisto: el diecisiete de mayo. En el Está Cabral.